Piernas perfectas de infarto en 6 pasos

Seamos honestos, tú y yo sabemos que quieres piernas perfectas. Es una parte clave del cuerpo  femenino (y bueno, los hombres las adoran). Si hay algo que puede detener el tráfico, son un par de piernas perfectas de infarto.

Y bueno, ¡no te asustes! No tienes que ser una modelo de Victoria’s  Secret para tenerlas. En realidad, toda mujer tiene el potencial para tener unas piernas perfectas.

Aunque como en muchas cosas de la vida, difícilmente las obtendrás echada en tu cama comiendo pizza (disculpa la sinceridad).

Entonces, ¿manos a la obra?

Hay un par de cosas (no tan difíciles de hecho) que puedes hacer para lograr esas piernas perfectas asesinas (ok, ok, ¡relax! ¡nadie a muerto por un par de piernas! -¿o sí?-) Déjame enseñarte cómo 😉

Paso #1 para unas piernas perfectas: Come bien.

Partamos por lo básico de lo básico, de adentro hacia fuera: deja de desayunar Y almorzar pizza.

No me odies, a mí también me encanta pero desafortunadamente Dios, el Universo, la vida (como quieras decirle) no le dio sabor a pizza a la lechuga, ni hizo saludable a la pizza.

Comer de vez en cuando comida chatarra no ha matado a nadie, pero no lo transformes en tu única opción alimenticia.

Para tener piernas perfectas debes tener una alimentación adecuada. Si esto no te convence, piensa en que tus piernas te acompañan en tu día a día como ninguna otra  parte de tu cuerpo.

O sea, ¡te llevan a todas partes! Y como al igual que tu auto, tienes que proporcionarles la energía y nutrientes correctos (nada de andar echando esa bencina de 93’, como mínimo la de 95’).

No se trata de no comer, ¡puedes comer todo lo que quieras! Pero regálale a tu cuerpo y a tus piernas perfectas alimentos vivos y sanos, con muchas proteínas para alimentar sus sensuales músculos.

Paso #2 para unas piernas perfectas: ¡Ejercítalas!

Algunos envidiosos dirán que es un cliqué pero ejercitarse es probablemente una de las cosas que más influyen a la hora de lograr esas piernas perfectas.

Es lo que les da contorno y firmeza, y fortalece su musculatura (aunque con moderación, tampoco queremos que parezcas un hombre).

Hacer sentadillas o subir escaleras son cosas simples que puedes hacer sin perder mucho tiempo y ganar mucho más (sí sabes a lo que me refiero).

Paso #3 para unas piernas perfectas: ¡Exfolia, exfolia, exfolia!

Aquí ya entramos en lo mío. Ya habrás leído mi post sobre la exfoliación pero no me cuesta nada reiterar algunas cosas. Exfoliar es la regla de oro para tener piernas perfectas.

Supongo que quieres que no sólo se vean bien sino que también se sientan aún mejor.

Consiéntelas exfoliándolas de 1 a 3 veces por semanas con un exfoliante más intenso como mi Chica de Ipanema, o a diario con una esponja o exfoliante suave como Morning Coffee.

Esto mantendrá tus piernas libre de impurezas, suaves, más receptivas para las cremas y listas para el siguiente paso.

Además, estos exfoliantes, al contener café, te ayudarán a disminuir esa piel de naranja y otros imperfecciones malignas que te atormentan.

Paso #4 para unas piernas perfectas: Depílalas.

Ok, sin entrar en controversias sobre los derechos de las mujeres a llevar el estilo de vida que les plazca y sobre si es natural o no es natural, yo personalmente pienso que no hay nada más sexy que unas piernas bien depiladas.

Esa suavidad al tacto mmm… (no sé a ti, pero a mí ya me está dando calor).

Entiendo que es un paso que a veces puede ser desagradable, doloroso, y que cuesta dinero y tiempo pero BELIEVE ME, los beneficios son ENORMES (sí sabes a lo que me refiero de nuevo –parece que tengo que dejar de hablar en clave-)

Paso #5 para unas piernas perfectas: Consiéntelas.

Como sabes, las piernas están en movimiento una buena parte del día sin contar las muchas horas que a veces pueden pasar de pie.

Así que cuando llegues a tu casa y te pongas cómoda, regálales un buen masaje para estimular la circulación y drenar los líquidos que puedan haber retenido.

También ponerlas en altura es un gran tip que previene la formación de várices y celulitis.

Paso #6 para unas piernas perfectas: Huméctalas.

Ok, ya tenemos casi piernas perfectas. Lo que nunca puedes olvidar es humectarlas, ya que este es un paso vital para hacerlas irresistibles a la mirada y todos los otros sentidos.

Hacerlo mejora su textura, tersura y elasticidad. O sea, piel de alto impacto.

Ya tienes todo lo necesario para tener tus piernas perfecta. Ahora sal a la calle, lúcelas y  causa estragos.

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